Soluciones comprobadas para el sector aeroespacial: Propulsión de satélites con nitruro de boro BNP-6
La cerámica de nitruro de boro ha revolucionado la propulsión satelital. El BNP-6, un compuesto de alto rendimiento, desempeña un papel clave en los propulsores de efecto Hall al soportar las condiciones extremas del espacio, como las altas temperaturas y la ionización, que normalmente desgastan los componentes y reducen la vida útil de los satélites.
Nitruro de boro BNP-6: una revolución en los propulsores
Diseñado para durar, el BNP-6 ofrece resistencia a los choques térmicos, resistencia mecánica y aislamiento eléctrico, lo que lo hace ideal para paredes de canales de propulsión. Soporta cambios de temperatura desde -100 °C hasta 1500 °C, ofreciendo así un rendimiento superior al de materiales tradicionales.
- La transparencia del BNP-6 a los campos electromagnéticos permite una aceleración del plasma más eficiente.
- Esto mejora directamente el rendimiento del sistema de propulsión
- Es resistente a altas temperaturas y al bombardeo de iones.
- Estas características lo hacen indispensable para satélites que operan tanto en órbita terrestre baja (OTB) como en órbitas geoestacionarias.
- El compuesto avanzado garantiza que los satélites permanezcan operativos durante periodos más largos.
- Este reduce la frecuencia de los fallos de funcionamiento y la necesidad de mantenimiento.